Branding es un anglicismo empleado en mercadotecnia que hace referencia al proceso de hacer y construir una marca.
Diferenciarse es hoy cada vez más difícil. Por ello, la clave de los negocios está en el Branding, es decir, en el poder de la marca como elemento diferenciador.
Naming es el nombre con que el público identifica a la empresa. Éste debe transmitir al público la imagen que se desee para identificar la marca y recomendamos que cumpla con una serie de premisas básicas:
Atributos Semánticos. Relación entre el nombre y el servicio que ofrece o sector en el que se encuentra.
Atributos Fonéticos. La sonoridad del nombre de marca es una regla imprescindible. El nombre que identifica a una empresa será tan sonoro como de fácil pronunciación, factor imprescindible para su posicionamiento en la mente del consumidor.
Atributos de Marketing. Atender al objetivo de marketing y a los valores que queramos transmitir a través de la marca es un elemento básico para la construcción del Naming.
Logotipo es el elemento gráfico que identifica y distingue a la marca. Por ello, para que un logotipo resulte congruente y exitoso deberá ser:
Legible, hasta el tamaño más pequeño.
Escalable, a cualquier tamaño requerido.
Reproducible, sin restricciones materiales.
Distinguible, tanto en positivo como en negativo.
Memorable, que impacte y no se olvide.